Para Fortalecer los Procesos de Cambio y Rechazar la Agresión
Por la Unidad de Bolivia y del Abya Yala (Continente Americano)
Abya Yala (el Continente Americano) vive uno de sus momentos históricos más significativos y esperanzadores para los pueblos. El saqueo incesante de nuestras riquezas, la exclusión social de la mayoría de la población, la herencia colonial de discriminación y racismo, la injerencia de los organismos internacionales y los centros del poder imperial en beneficio sólo de las élites locales y del gran capital transnacional, la represión y la violencia contra las grandes mayorías, la expoliación en detrimento del equilibrio ecológico y la seguridad alimentaria están hoy siendo profundamente modificados en busca de su superación.
Los movimientos de resistencia y lucha que pueblan diferentes regiones del continente, los procesos de cambio impulsados por movimientos sociales y gobiernos que favorecen a esas mayorías empobrecidas y excluidas en varios países de Sud y Centro América, una tendencia creciente a la unidad soberana y solidaria de los pueblos y los gobiernos a través de iniciativas como el ALBA y la UNASUR son parte significativa de este momento histórico favorable para los desheredados de siempre.
Uno de los países que expresa notablemente este proceso continental es Bolivia. Allí se concentran muchas de las profundas esperanzas y realidades de los procesos de cambio a través de diversas políticas que buscan superar la histórica exclusión política, económica, social y cultural de los sectores indígenas, campesinos y poblaciones empobrecidas de las ciudades. Allí se están realizando muchos esfuerzos para construir un país más justo, equitativo, inclusivo, participativo y respetuoso de su diversidad.
También en Bolivia se concentran gran parte de los esfuerzos del imperio del norte, de las fuerzas políticas más reaccionarias del país y del mundo, de las actitudes racistas y excluyentes de las logias y élites locales que tratan de impedir que el proceso de cambio se consolide y buscan perpetuar el sistema que les genera privilegios en desmedro de las mayorías. Clara muestra de esta estrategia política continental basada en un discurso divisionista y segregador del país, es la ofensiva violenta que los sectores del viejo poder colonial y neoliberal desataron las pasadas semanas en Bolivia con el saldo de casi una veintena de campesinos/as asesinados/as, decenas de heridos y golpeados, acciones de violencia racista contra la ciudadanía, toma y destrucción de medios de comunicación y entidades del Estado, etc.
Si bien estos días el país atraviesa por un proceso de negociaciones que tiene por un lado al gobierno nacional y a los movimientos sociales que apoyan el proceso de cambio y por el otro a los sectores opositores que representan a las viejas estructuras del poder patronal, lo cierto es que la estrategia que busca erosionar el proceso de cambio sigue latente. Por eso Bolivia y la unidad continental necesitan de nuestra solidaridad y apoyo. Consolidar el proceso de cambio en Bolivia al mismo tiempo de repudiar las actitudes violentas y de agresión que sufre el pueblo boliviano que sí cree y trabaja cotidianamente por un nuevo país, es una manera de fortalecer otro mundo posible y la unidad de los pueblos y gobiernos del Abya Yala.
Las organizaciones sociales y personas que nos adherimos a este documento y movilización “para fortalecer los procesos de cambio y rechazar la agresión. Por la unidad de Bolivia y del Abya Yala (Continente Americano)”, expresamos lo siguiente:
1. Respaldamos las políticas impulsadas por el gobierno boliviano que tratan de restituir la justicia, la equidad y la inclusión económica, social, política y cultural de los sectores más desfavorecidos a lo largo de la historia colonial y republicana del país. Ese respaldo se alimenta en la voluntad democrática del pueblo boliviano que en el Referéndum Revocatorio de Mandatos del 10 de agosto del presente año, respaldó contundentemente al proceso de cambio con más del 67% de apoyo del total electoral y con una victoria clara en 95 de los 112 municipios del país. Por tanto, rechazamos todo intento de divisionismo de la integridad territorial del país así como toda violencia ejercida contra un pueblo y un gobierno que legítimamente ejercen su derecho a construir otra Bolivia, más justa y digna, más incluyente y respetuosa de su diversidad. Exigimos, al mismo tiempo, el juzgamiento de las personas responsables de la masacre de campesinos/as en Pando y de los otros actos de violencia cometidos contra el pueblo boliviano.
2. Respaldamos la consolidación del proceso de cambio y de participación ciudadana a través de la realización del Referéndum por el cual la ciudadanía emita su decisión respecto a la aprobación o no del nuevo texto constitucional que expresa de manera legal gran parte de los cambios esperanzadores en Bolivia. En especial, creemos que esa nueva Constitución Política del Estado supera los sistemas del gran latifundio y de formas de esclavitud que muchos/as bolivianos/as aún soportan como una de las mayores expresiones de inequidad e injusticia (1)
3. Respaldamos los procesos de unidad de los pueblos y Estados de Abya Yala que se expresan en las resoluciones de UNASUR o las iniciativas crecientes como el ALBA. Rechazamos, por el contrario, la injerencia del gobierno norteamericano que busca desestabilizar los procesos de cambio de Bolivia y otros países de la región, así como financiar a los grupos violentos racistas, clasistas y divisionistas.
516 años de resistencia indigena, negra y popular : por un 12 de octubre con un otro mundo possible! Por la soberanía, la justicia y la dignidad en Bolivia y Abya Yala
Suiza, 11 de octubre del 2008
[1] Según datos del INRA, 24 beneficiarios del departamento de Santa Cruz (0,1% del total de propietarios agrícolas y ganaderos) poseen 1,4 millones de hectáreas con propiedades mayores a 20 mil hectáreas cada una. Llama la atención que en Santa Cruz apenas 4 beneficiarios detentan predios de más de 50 mil hectáreas de extensión. Estos cuatro privilegiados tienen casi 803 mil hectáreas. Los sistemas contemporáneos de esclavitud del gran latifundio fueron verificados el año 2008 por comisiones de la ONU, Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la OEA, del Defensor del Pueblo, la Organización Internacional del Trabajo (OIT), de la Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH), de la Organización Mundial contra la Tortura e inclusive del Departamento de Estado de Estados Unidos entre otros.
Para firmar la petición, conectarse a http://www.gopetition.com/online/22274.html